Bienvenidos inquietos tripulantes, de esta nave que inicia su apasionante trayecto por el espacio cultural que nos rodea, y que desgraciadamente muchos ignoran de su existencia.
Al mando nos hemos puesto unos jóvenes pilotos, los cuales pretendemos, desde la más pura humildad de nuestras opiniones, intentar que esta ruta no muera en el olvido, y que vosotros, apreciados viajeros, os sintáis atraídos por este viaje que promete ser apasionante.
Desde mi pequeño rinconcito de esta nave pretendo mostrar a aquellos que se sumen a esta aventura, que existe otro tipo de música, dejando a un lado galaxias “reggetonianas” y comerciales que, sinceramente, no cumplen con la definición básica de lo que es la música y de lo que ella se desencadena.
Y os preguntareis ¿qué es la música entonces? Pues mirad compañeros de viaje, la música, como toda manifestación artística, es un producto cultural, el cual tiene su fin en suscitar una experiencia estética en el oyente y expresar sentimientos, circunstancias, pensamientos, risas y un largo etcétera, que estimula a la percepción de cada uno de nosotros.
Por eso os pregunto si las galaxias anteriormente mencionadas os suscitan sentimientos, circunstancias. Algunos dirán que si, que les hace ser felices, “pegarse la fiesta” como se dice, pero no es aquí donde yo quiero llegar en este recondo de la nave.
Es este el motivo que me lleva a intentar mostraros propuestas musicales, que muchos conoceréis, otros no tanto, y algunos nada de nada. Intentaré escribir sobre música que emocione, que transmitan mensajes (ya sean positivos o negativos); pero que al fin y al cabo puedan conmover al oyente.
Como he dicho anteriormente, somos pilotos jóvenes e inexpertos los que comandamos la nave, y que lo que aquí reflejamos es nuestra humilde opinión, y en mi caso, precisamente, no me quiero convertir en ningún mesias musical (como lo pudo ser el gran Joaquin Luki, que en paz descanse), simplemente ofreceros rutas musicales, que para mi si cumplen la definición mencionada líneas arriba.
A veces he pensado que sería de nosotros sin una “Música” que te hiciera recordar experiencias inolvidables, recuerdos maravillosos, instantes preciosos e incluso, porque no. Que espléndido es poder apoyarte en una letra, en una música y volver a recordar todo lo agradable que te haya podido ocurrir (dicen que recordar es volver a vivir), o que una canción te ayude para levantarte el ánimo en momentos y situaciones complicadas. Eso no tiene precio.
Por eso, y pido perdón si me muestro algo repetitivo, quiero compartir con todos vosotros esta maravillosa experiencia de disfrutar de la música que llega tan dentro de ti.
Un abrazo a los futuros pasajeros.
Fran Díaz
Al mando nos hemos puesto unos jóvenes pilotos, los cuales pretendemos, desde la más pura humildad de nuestras opiniones, intentar que esta ruta no muera en el olvido, y que vosotros, apreciados viajeros, os sintáis atraídos por este viaje que promete ser apasionante.
Desde mi pequeño rinconcito de esta nave pretendo mostrar a aquellos que se sumen a esta aventura, que existe otro tipo de música, dejando a un lado galaxias “reggetonianas” y comerciales que, sinceramente, no cumplen con la definición básica de lo que es la música y de lo que ella se desencadena.
Y os preguntareis ¿qué es la música entonces? Pues mirad compañeros de viaje, la música, como toda manifestación artística, es un producto cultural, el cual tiene su fin en suscitar una experiencia estética en el oyente y expresar sentimientos, circunstancias, pensamientos, risas y un largo etcétera, que estimula a la percepción de cada uno de nosotros.
Por eso os pregunto si las galaxias anteriormente mencionadas os suscitan sentimientos, circunstancias. Algunos dirán que si, que les hace ser felices, “pegarse la fiesta” como se dice, pero no es aquí donde yo quiero llegar en este recondo de la nave.
Es este el motivo que me lleva a intentar mostraros propuestas musicales, que muchos conoceréis, otros no tanto, y algunos nada de nada. Intentaré escribir sobre música que emocione, que transmitan mensajes (ya sean positivos o negativos); pero que al fin y al cabo puedan conmover al oyente.
Como he dicho anteriormente, somos pilotos jóvenes e inexpertos los que comandamos la nave, y que lo que aquí reflejamos es nuestra humilde opinión, y en mi caso, precisamente, no me quiero convertir en ningún mesias musical (como lo pudo ser el gran Joaquin Luki, que en paz descanse), simplemente ofreceros rutas musicales, que para mi si cumplen la definición mencionada líneas arriba.
A veces he pensado que sería de nosotros sin una “Música” que te hiciera recordar experiencias inolvidables, recuerdos maravillosos, instantes preciosos e incluso, porque no. Que espléndido es poder apoyarte en una letra, en una música y volver a recordar todo lo agradable que te haya podido ocurrir (dicen que recordar es volver a vivir), o que una canción te ayude para levantarte el ánimo en momentos y situaciones complicadas. Eso no tiene precio.
Por eso, y pido perdón si me muestro algo repetitivo, quiero compartir con todos vosotros esta maravillosa experiencia de disfrutar de la música que llega tan dentro de ti.
Un abrazo a los futuros pasajeros.
Fran Díaz
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